Una convivencia complicada - 2

Al llegar al restaurante, se sentaron tranquilamente, Kyuhyun sacando su móvil al instante para verificar la señal mientras que Changmin revisaba el menú, pensando en qué podría pedir. Por otro lado, los más jóvenes sonreían divertidos al ver a sus hyungs de esa forma, ya que eran demasiado predecibles a veces.

-Buenas tardes, ¿qué van a pedir?

La vos de un chico les sobresaltó un poco, ya que estaban en su mundo, pero al regresar a la realidad, observaron a su interlocutor, viendo que tenía unas facciones un tanto… ¿femeninas? Los cuatro chicos se miraron un momento, ya que habían pensado exactamente lo mismo en ese instante.

-Yo quiero una lasagna

Changmin siempre el primero en pedir ya había hecho su orden, dejando el menú a un lado para relajarse en la silla lo más tranquilo.

-Que sean dos…
-Mejor tres

Tanto Jonghyun como Minho se habían decidido por lo mismo que su mayor, dejando que el buen gusto por la comida de este los guiara.

-Yo… ¿Qué podrías recomendarme?

Aquella pregunta por parte del mayor de los cuatro provocó que los más chicos lo miraran sorprendido, ya que él nunca pedía sugerencias. Con una mirada cómplice sonrieron, sin decir una palabra, pero dejándole un nerviosismo a Kyuhyun ya que notaba demasiado silencio en la mesa.

-Oh, pues aquí hacen unas calabazas rellenas excitas, aunque no te diría que las pidas, es que me encantan las calabazas. Sé que la lasagna es buena… Las pastas en general suelen ser ricas aquí.

Mientras el mesero describía los diferentes platillos, una sonrisa divertida se posaba en sus labios al pensar en que pronto sería su hora de almuerzo. Por otro lado, su cliente le observaba, asintiendo suavemente a cada una de las sugerencias.

-Pues entonces pediré una lasagna
-Ok, son cuatro lasagnas entonces… ¿Para beber?

Al escuchar que eran cuatro, observó a sus compañeros, los cuales asintieron, diciéndole: “Sí, pedimos lo mismo”. Al momento de decidir la bebida simplemente sonrieron, dejando que el mayor del grupo pidiera lo de siempre.

-¿Qué vinos tienen?
-Oh, tenemos unos vinos de Italia, y algunos de Latino América
-Quiero un vino de Chile

La voz cantarina del más alto del grupo se hizo presente, haciendo que terminaran por pedir un vino de dicho país. Cuando el mesero, cuyos cabellos eran rubios y sus ropas blancas y negras, se retiró, Changmin, Minho y Jonghyun miraron al mayor de todos con una sonrisa divertida, esperando que este lo notara.

-¿Qué?
-¿Desde cuándo pides sugerencias para comer? Siempre terminamos pidiendo lo mismo que Changmin…
-¿Desde hoy? Solo quería saber qué otras cosas habían…
-Si siquiera sabías que pedimos lasagna

Changmin y Minho le replicaban y molestaban para ver cómo reaccionaría, esperando que se frustrara y los mandara a ya sabían donde, solo como él sabía hacerlo.

-Bueno, ya, solo quise saber qué más había… Además, quería saber si era realmente hombre o mujer… ¿No vieron su rostro?

Al escuchar aquello, todos soltaron una pequeña risa, dejándose llevar por estas para finalmente calmarse.

-Su voz lo delata, es un hombre. Aunque si quisiera podría pasar por mujer… ¿Lo imaginan con un vestido blanco? Tal vez una peluca rubia y los labios pintados… Es una mujer en apariencia…
-Aunque yo no hablaría mucho… ¿Se fijaron el torso que tenía? Parece que practica algún deporte o algo…

La conversación cambió drásticamente a lo que harían después de comer al notar que el mesero había regresado, sirviéndoles la copa de vino para luego dejarla en la mesa.

-Dentro de no mucho estaré trayendo las lasagnas…

Cuando nuevamente se retiró, los cuatro se juntaron en el centro de la mesa para hablar en voz baja.

-Debe de ser gay, no puede ser que con esas facciones no lo sea…
-¿Quién dice? Tal vez tiene una novia escondida por ahí…
-Hasta sus movimientos son algo femeninos… Yo apuesto el almuerzo a que es gay

Al escuchar esto, todos sonrieron de lado, asintiendo con suavidad. Finalmente los que perdieran la apuesta pagarían el almuerzo, quedando de esta forma: Jonghyun y Minho a que no sería gay, y Kyuhyun con Changmin a que sí lo sería.

-¿Cómo haremos para averiguarlo?
-Fácil, alguno de lo que piensa que sí es gay debe flirtear con él, veremos como responde y en base a eso decidiremos… Así que decidan entre ustedes quién le coqueteará.

Con el clásico “Piedra, papel o tijera” se decidió que Kyuhyun le coquetearía, cosa que les causó gracia a todos, provocando que varias miradas cómplices aparecieran en aquella mesa.
En el momento que el mesero regresó con las lasagnas, colocó cada plato frente a cada uno de ellos, haciendo una pequeña venia para luego intentar retirarse, pero el más grande de la mesa le detuvo con un llamado, haciendo que se volteara para ver si le había faltado algo.

-¿Me olvidé de algo?
-Sí, de decirme tu nombre… Me gustaría saberlo si no es inconveniente…

Cuando escuchó las palabras por parte de su cliente no pudo evitar que una sonrisa penosa se presentara en sus labios, mirándole luego sin quitar su sonrisa.

-Me llamo Lee Sungmin… Es un placer servirles…
-El placer es nuestro… mi nombre es Cho Kyuhyun.

Cuando se presentaron, ambos hicieron una pequeña venia, sonriendo un poco más apenado el rubio para luego retirarse y mirar a los menores.

-Si no es gay, yo no sé lo que es una consola de video juegos

Ante aquel comentario dejaron escapar unas claras risas, negando suavemente para luego empezar a comer, bebiendo de vez en cuando el vino que habían pedido, siendo Minho y Changmin los que menos bebieron, dejando a Kyuhyun y Jonghyun el resto de este.

Al terminar de comer pidieron la cuenta, permitiendo muy cordialmente que los más chicos del grupo pagaran. Cuando se estaban por levantar, el mesero llegó para retirar los platos.

-¿Desean un café?
-No gracias, ya nos estamos retirando… Aunque probablemente regresemos…
-Los estaremos esperando con ansias

Ante estas palabras, el rubio observó a Kyuhyun de reojo, llevando los platos de vuelta a la cocina para luego dejar que los menores salieran.
Una vez afuera todos comenzaron a molestar al mayor.

-Hyung tiene un admirador
-Hyung tiene un enamorado
-Creo que vendremos seguido a comer aquí

Los comentarios de los tres menores solo lograron que el mayor caminara sin prestarles atención, haciendo como si nada hubiera pasado.

-La comida no estuvo mal… Si quieren venir a comer aquí no tendré problema…
-Hyung quiere ver a su admirador


Sin poder evitarlo los otros continuaron molestándole mientras caminaban sin rumbo alguno, viendo lo que podrían hacer el resto de la tarde.

Una convivencia complicada - 1

Aquí les dejo un pequeño fanfic que empecé. Trata de la Kyu line~ Espero les guste ♥

-¡Minho ah! Ve a levantarlo a Changmin, eres al único que no muerde cuando lo intentan levantar.
-¿Ah? ¿Por qué debo ir yo? Mejor que vaya Kyuhyun hyung
-Olvídalo, yo no iré. Sabes que a mí me golpea… Jonghyun, ve tú, puede que esta vez no crea que eres comida.
Ante esas palabras, Minho y Kyuhyun soltaron unas divertidas risas al recordar cómo la última vez que le había despertado, Changmin, entre sueños, le mordió la mano creyendo que se trataba de comida.
-No fue divertido, ya dejen de reír…  Y ya dije que fuera Minho… Es al único que le comparte la comida, así que a él le debería hacer caso…
En cuanto se escuchó un suspiro, Lee supo que había ganado la discusión, por lo que solo dejó que el menor del departamento fuera en busca del bello durmiente.
-Oye, cara de mono, despierta de una vez…
Mientras hablaba tomó un almohadón y se lo lanzó al mayor, viendo que este ni se inmutaba.
-¡Changmin ah! Levántate…
Al no recibir respuesta alguna, siquiera un movimiento por parte de su Hyung, simplemente se dedicó a sentarse sobre él, en la parte de sus piernas, recostándose luego sobre el resto de su cuerpo.
-Changminnie... Despierta, dormilón
Su tono era suave y dulce, fingiendo ser alguna chica con la que el contrario podría llegar a soñar, pero tampoco notó cambio alguno en el ajeno, por lo que suspiró y se levantó, acercándose a su oído para susurrar solo la palabra “Almuerzo”. Esas míseras sílabas habían sido más que suficientes para hacer que Changmin abriera los ojos y se sentara, mirando al menor.
-¿Ya es tan tarde?
Minho no pudo evitar sonreír divertido, empujándole un poco por la cabeza antes de volver a caminar hacia la puerta.
-Anda, ven que te estamos esperando

Luego de que el dormilón del lugar se hubiera levantado y vestido, se dirigió a la sala, viendo que estaban todos excepto Jonghyun.
-¿Y Jong?
-Está buscando algún delivery al cual pedir… Ninguno tiene ganas de cocinar, y no creemos que tú fueras a hacerlo.
Las palabras de su mejor amigo de la infancia le provocó risas, pero no pudo evitar darle la razón, definitivamente cocinar era algo que ahora no tenía ganas de hacer.
-Mejor vamos a comer afuera, quiero mover las piernas…
El enérgico maknae definitivamente quería salir, y eso se le notaba en los ojos.
-Ya saldrás a correr luego de comer…
-O tal vez salga ahora, seguramente no aguanta y sus piernas empiezan a moverse solas.
-Y se va corriendo a dar una vuelta para regresar antes de que comamos, seguro se lo pone como meta.
Mientras los mayores hablaban y molestaban al más pequeño, Jonghyun había regresado a la sala, observando la situación para dejar escapar un suspiro.
-¿Es que nunca se cansan de molestarlo? Si siguen terminará por golpearlos
-Gracias Jong, creo que eres el único que comprende mi carácter en este departamento…

Finalmente el ambiente se había calmado y ahora estaban decidiendo qué hacer con la comida, la cuestión era si pedir o seguir la idea de Minho para ir a comer afuera.
-No tengo ganas de salir… Además en media hora se termina de actualizar mi notbook, si necesita actualizar algo más tengo que estar aquí…
-Yo simplemente no tengo ganas de salir.
Claramente los mayores siempre eran el problema cuando se trataba de su pereza. Los dos menores se miraron y luego sonrieron de lado, levantándose ambos para finalmente caminar hacia la puerta.
-Supongo que entonces nos iremos nosotros dos solos… ¿Recuerdas ese lugar de comida italiana que te mencioné? Podríamos ir ahí.
-Escuché que tienen también una gran señal de internet… Podría mandarle un mensaje a MinHyuk… ¿Te acuerdas de él?
-¡Oh! Tu amigo de la banda, ¿verdad? Era simpático si mal no recuerdo…
Antes de que siquiera se acercaran a la puerta, dos chicos sumamente altos se encontraban parados frente a ellos, mirándoles con una ceja alzada y sus brazos cruzados.
-¿Comida italiana?
-¿Internet?
Los menores volvieron a mirarse, sonriendo de lado para luego asentir al unísono, acercándose a los más altos para tomarles del brazo y dirigirse a la salida.
-Changmin ah  Este lugar te gustará, tienen unas pastas estupendas
-Vamos Kyu  No sabes los buenos vinos que hay en el lugar además del internet
Mientras los más chicos tiraban de sus brazos, los mayores iban cediendo ante sus palabras, cayendo finalmente en la trampa para luego encontrarse los cuatro juntos caminando en dirección a aquel lugar mencionado antes.
-Más vale que sea bueno, porque si no te obligaré a cocinarme por toda una semana
Las palabras amenazadoras del más alto del grupo hacia el maknae eran pronunciadas mientras lo abrazaba por el cuello, sonriendo divertido.
-Jonghyun, sabes que si el vino no es de calidad tendrás que limpiar la casa por el resto del mes, ¿verdad?
Por otro lado, el más grande molestaba a su amigo, dándole un ligero empujón en el brazo al finalizar su oración. Luego de semejantes “amenazas” solo dos palabras fueron escuchadas.

-Sí, hyung

Un baile especial

¿Había mencionado ya que me encantan los roles sobre bailes? xD Este es un roleo que escribí hoy :3 Me gustó como quedó, así que lo comparto aquí(?) y les dejo el video en el que me inspiré jeje

Había decidido que ya era tiempo de salir a bailar un poco, pero en su cuarto no podía practicar tranquilo, por lo que simplemente se dedicó a buscar una habitación o algún aula vacía. Llevaba su pequeño equipo de música con él y su ipod, acompañado de un cable para conectarlo. Podría haberse llevado su equipo de música real, pero ocupaba demasiado espacio y eso había sido un regalo de su padre, por lo que, junto con todas las cosas que este le había obsequiado, había quedado en su casa. Cuando por fin encontró un aula vacía, entró sin miedo, dejando el equipo cerca de una corriente eléctrica para conectarlo y luego el ipod a este. Con una ligera sonrisa, de esas genuinas que escapaban de sus labios cuando estaba por bailar, encendió el aparato, escuchando la música mientras la canturreaba de vez en cuando. Sus pasos fueron lentos los primeros tiempos para luego empezar a moverse acorde a la melodía que sonaba, haciendo que sus manos recorrieran su cuerpo de a ratos para luego bailotear juntas por el aire. Su cuerpo se movía libremente por fin, dejando lugar a movimientos de caderas, torso y cabeza que extrañaba hacer. Mientras recordaba haber bailado esto con sus compañeras de baile, una sonrisa divertida surcaba sus labios, ya que estas le habían replicado por los movimientos que él le pedía que hicieran, pero, para su alegría, terminaron accediendo, ya que le conocían y sabían que no se aprovecharía de la situación. Finalmente la parte que no era bailada sino cantada había llegado, así que detuvo sus movimientos unos segundos antes para poder cantar como debía, o al menos eso intentaba ya que se notaba que había incluido demasiada energía al momento de bailar y ahora le faltaba un poco el aire, pero no por ello dejó de cantar, más allá de que solo se tratara de algunas notas agudas. Más allá de ello, enseguida llegó el solo de baile, moviéndose al ritmo de la música una vez más, dejándose llevar por completo hasta que necesitó volver a cantar, estando ya algo cansado por lo que solo cantaba, moviéndose de a ratos, terminando con su pequeño tic de la mano en la cabeza, acompañado de esta misma alejándose un poco de su cuerpo. Con una amplia sonrisa suspiró, relajándose por fin para luego desplomarse en el suelo, respirando agitadamente por el baile y las energías agotadas que tenía en ese momento

Arribando a Corea - 2

Al observar hacia atrás clavaste la mirada en el cajero, el cual te observó de reojo una milésima de segundo, sonriendo de lado mientras seguía atendiendo. Aquello te pareció tan descabellado que casi no lo creíste, pensaste que se trataba de una broma o algo parecido pero cuando observaste de nuevo a aquel chico este te observó de reojo de nuevo, manteniendo una sonrisa casi invisible. ¿Acaso te estaba pidiendo de salir en una cita?

Mientras pensabas qué responder pudiste escuchar que algunas chicas parecían atolondrarse con las acciones del cajero, cuando este se mordía el labio o cuando se los relamía. Finalmente buscaste entre tus cosas un bolígrafo, borrando el mensaje que estaba escrito para anotar otro: ¿Acompañante? ¿Te refieres a ti? ¿Por qué debería?

Al terminar te acercaste nuevamente al mostrador, llamando la atención del cajero una vez más.

-Perdona, pero esto no es lo que pedí

Con una pequeña sonrisa le entregaste el vaso, viendo que este también sonreía ligeramente.

-Ahora mismo te lo cambio

Y como dijo, a los pocos minutos te entregó un recipiente nuevo, tocando por una milésima de segundo sus dedos. Agradeciste con una ligera venia y cuando te encaminaste de nuevo a tu asiento leíste la nueva respuesta: El dicho dice “Mejor solo que mal acompañado” pero en este caso no merece la pena seguirlo al pie de la letra. ¿Nos vemos en diez minutos a la vuelta?

Comiste tu galleta y bebiste tu café, pensando si ir o no, hasta que finalmente te decidiste, saliendo de la cafetería para buscar algún callejón que guiara a una puerta trasera. En cuanto lo encontraste te recostaste sobre la pared, esperando un poco hasta escuchar el ruido de una puerta. Al girar la cabeza, allí estaba ese cajero con su cabello oscuro al igual que sus ojos.

-¿Vamos?

Con un ligero asentimiento de cabeza caminaron fuera de allí, terminando en un pequeño parque donde se sentaron a conversar un poco.

-No eres de aquí, ¿verdad?
-No, he venido para mejorar mi nivel de coreano

Ante tus palabras el peli negro sonrió ligeramente, parecía que había recordado algo.

-¿Te has logrado instalar bien? ¿Cuánto planeas quedarte?
-Me he instalado hace unas horas… Y la verdad creo que el programa es de unos seis meses…

Tu interlocutor asintió ligeramente, procesando tus palabras mientras sonreía con sutileza.

-¿Has visto algún programa de aquí o escuchado la música? Dicen que la música de aquí está llegando a todo el mundo.
-A decir verdad no he tenido tiempo para ello… Me he centrado tanto en los estudios que no pude buscar nada del país al que venía… Aunque sí he escuchado algunas canciones… En la radio.

Ante tales palabras, el  cajero te observó con extrema curiosidad, sin molestarse en ocultarla.

-Ah, ¿sí? ¿Qué canciones has escuchado? Tal vez conozco alguna
-Pues… No recuerdo muchos nombres… Había una que me había gustado… Mm… ¿Gray paper? Creo que se llamaba así… Dijeron que el cantante se llamaba Yesung… Aunque a decir verdad no lo conozco mucho.

Aquello lo confesaste algo apenada ya que te sentías un poco mal al pensar en que no habías investigado demasiado del tema.

-Oh… Comprendo. He escuchado la canción. Por cierto, no me he presentado. Me llamo Kim Jong Woon pero mis amigos me dicen Yesung, un placer conocerte.


Aquellas palabras llegaron a tus oídos de una manera lejana. Estabas hablando con una celebridad y siquiera lo habías notado. Bueno, es verdad que no sabías como lucía pero de todas formas quisiste darte un pequeño golpe en la cabeza por ello.